En la lucha por el orgullo, uno de los platos fuertes de Grand Slam México, el primer evento de All Elite Wrestling en nuestro país, Místico salió triunfador, pero no sin sufrir una gran dosis de las artimañas de Maxwell Jacob Friedman en su mano a mano.
Ya la semana pasada, MJF había atacado a Místico y se había llevado una advertencia para cuando se vieran en la Arena México, que se le entregó al Príncipe de Plata y Oro con una entrada espectacular, todos cantando “Me muero” de La Quinta Estación.
El Seminarista de los Ojos Blancos no solo recibió castigos de MJF, pues MVP y los campeones de parejas, Shelton Benjamin y Bobby Lashley, aprovecharon descuidos del referee para atacar al mexicano.
Tras resistir cada embate logró aplicar la Mística y cuando ya tenía rendido al norteamericano, MVP distrajo al tercero sobre la lona para evitar la derrota.
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Después, MJF aplicó un puñetazo a las partes blandas del enmascarado sin que lo vieran para ponerlo de espaldas, pero la cuenta solo llegó a dos.
Desesperado, solo pudo atinar a patear la entrepierna de Místico y el árbitro ahora sí hizo válida la descalificación, pero no quedó ahí ya que le quitó la tapa, mientras Lashley y Benjamin seguían con la paliza, hasta que llegaron al rescate Kevin Knight y Speedball Bailey.
Atlantis sacó la experiencia y triunfó pese a los abucheos
La primera contienda tuvo de todo, con un enfrentamiento en equipos de siete luchadores en la que destacó la presencia del campeón de TNT, Adam Cole, liderando a Bandido, Templario, Daniel García, Brody King y la dupla padre e hijo, Atlantis y Atlantis Jr.
Enfrente estaba la Don Callis Family, integrada por Konosuke Tashekita, Lance Archer, Josh Alexander, Kyle Fletcher, Templario y Protoshita, además de Volador Jr.
Las emociones las pusieron los vuelos de Templario y Bandido, quienes no tuvieron empacho en despegar en varias ocasiones para castigar al enemigo, mientras Josh Alexander y Kyle Fletcher apostaban por golpes al cuerpo.
Pero fue Atlantis quien quedó mano a mano con Dax Harwood y en un descuido lo puso de espalda contra la lona para la cuenta de tres. Y así fue como el Ídolo de los Niños, el estandarte por décadas del Consejo Mundial de Lucha Libre, tuvo su momento de gloria en AEW Grand Slam: México.